Ecologistas. Parece que ha llegado la moda en la que la gente comienza a preocuparse por el cuidado del planeta. Y digo moda, porque mucha de esa gente que ahora se denomina ecologista, es de boquilla. Se cree que con apagar el botoncito rojo de los enchufes ya ha hecho su buena obra y puede irse a dormir con la conciencia tranquila. Eso sí, al día siguiente coge el coche para ir a un lugar en el que podría ir tranquilamente en bus.
Pero esos no son los únicos que me cabrean. Aquellos ecologistas que parece que su deseo es devolvernos a la Edad Media sí que me cabrean. Esos radicales que no quieren ni que usemos coches, ni que consumamos petróleo, etc... Pero no os lo perdáis, porque tampoco quieren que usemos algunas fuentes de energía renovables como la eólica, la solar, la geotérmica... ¿Que es lo que quieren? Pues eso, la Edad Media.
Tampoco digo que haya que ser como los americanos, que se beben el petróleo como si fuera cerveza (ademas petróleo extranjero, el suyo se lo guardan). Tendríamos que aprovechar las energías renovables y depender al mínimo del petróleo, pero hay gente que tampoco quiere algunas renovables: que si los molinos matan pájaros, que si las placas solares contaminan en su construcción.... ¿Entonces que hacemos para no depender del petróleo? Sopas y sorber no puede ser.
Se me ocurre una energía: la nuclear. Pero no puedes decirlo en alto, porque enseguida se te echan al cuello. Te llaman de todo, te mencionan Chernobyl, que si mutantes, bla bla... Lo cierto es, que la energía nuclear en sí es limpia. Los residuos se guardan en lugares especializados, fuera del alcance de las personas, y no contaminan la tierra. Si se cumplen las estrictas normativas actuales no hay ningún problema.
Lo que creo es que algunos ecologistas se quejan por quejar, porque si no se les acaba el chollo. Como a otros tantos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario