Llevamos ya varios días asistiendo a un espectáculo más propio de un circo o de un culebrón de televisión que de la vida real. Me refiero a todo el asunto relacionado con el empresario español Ruiz-Mateos y su burla a la justicia. Tras varios intentos frustrados para hacerle acudir a una vista judicial, la magistrada ha conseguido que comparezca.
El fundador de Nueva Rumasa (ya que la antigua también quebró y fue expropiada en 1983) está siendo investigado por un caso de estafa en la compraventa de un hotel de Mallorca. Esto le obligaba a presentarse en los juzgados de Mallorca, a los cuales no ha acudido en las anteriores 4 citaciones. Ha sido necesario entrar en su casa y transportarlo a la fuerza. En las anteriores citaciones alegaba excusas ridículas para no presentarse: que si un dedo del pie roto, que si un ataque de ansiedad, etc...
Hace varios años ya que Ruiz-Mateos organiza este tipo de escándalos. La gente quizá no se acuerda de algo que contestó cuando una periodista le preguntó acerca de la justicia. Textualmente dijo: "A los jueces me los paso por los cojones".
¿En que clase de país y sociedad vivimos que permitimos casi impasibles a semejante burla de la justicia? Estamos de acuerdo en que el sistema judicial español no es el mejor del mundo, pero merece ser respetado.
Este hombre (y sus hijos también) se burla de nosotros a nuestra cara. Es la segunda vez que comete una estafa a nivel nacional con sus empresas, prometiendo unos beneficios que luego no dio. Encima usa el caso de los niños desaparecidos Ruth y José para desviar la atención sobre su caso. Una auténtica vergüenza.
Este hombre sigue creyéndose una especie de superhombre intocable para la justicia. El día en que entre en prisión, veremos que cara se le queda. Un aplauso para la magistrada María Pascual.
Os dejo un video:
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