Las palabras del ministro de educación Wert han hecho que salte la polémica, y con razón. El ministro se refirió a la educación catalana como la responsable del aumento del sentimiento independentista en Cataluña, y soltó la frase gorda: "Se trata de españolizar a los catalanes". Enseguida saltaron las criticas sobre un comentario, que parecía más propio de la época nacionalcatólica de este país, que de una democracia madura.
Aunque Wert ya nos tiene acostumbrados a este tipo de meteduras de pata: su gestión del ministerio se basa en recortar y adoctrinar. Recorta en educación publica mientras da mayores subvenciones a colegios concertados y públicos, y adoctrina a los más pequeños de este país con la asignatura de Educación cívica y constitucional. Pero la verdad es que en esta declaración se le ha visto el plumero.
Estamos viendo como el gobierno, o algunos ministerios concretamente, están sucumbiendo a la influencia de la extrema derecha. Gallardón con sus leyes nuevas en el código penal o con la ley del aborto, Wert con la educación, el ministerio de cultura, etc... Todo esto con el único objetivo de contentar a estos grupos que prestaron su apoyo para que el PP ganara las elecciones.
Con el tema de Cataluña, hay que ofrecer ante todo libertad. Si una persona se siente catalán y no español, es imposible convencerlo de lo contrario (como sería imposible convencer a un manchego de que es andaluz por ejemplo). Los sentimientos de identidad no se pueden cambiar ni modificar, esa algo que nace con esa persona, no se implantan. Por supuesto que habrá catalanes que se sientan españoles al mismo tiempo, y no por ello son menos catalanes.
Nuestras raíces son las que son, no podemos cambiarlas, y mucho menos obligar a otras personas a aceptar algo que realmente no sienten.
Muy buen articulo me ha gustado, de acuerdo completamente amigo mio
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